Conducción – Pilar 1 de Eficiencia Hídrica Agrícola
Pregunta clave
¿Cuán bien se transporta el agua desde la fuente hasta el huerto?
Los sistemas para transportar el agua han mejorado notoriamente desde los inicios de la agricultura, ya que cuando se lograron comprender los efectos de la infiltración en el propio suelo mientras el agua viajaba encima de este, comenzaron los desarrollos para minimizar la percolación del agua antes de su llegada al cultivo; primero a través del uso del mismo suelo arcilloso para recubrir suelos más porosos, hasta el uso de rocas y nuevas mezclas que aumentaron la impermeabilidad en el camino del agua.
Aunque se trate de una “pérdida de agua” desde el punto de vista del agricultor; a nivel de cuenca hidrológica es una recuperación, ya que se integra agua al suelo local que permite el desarrollo de otros ecosistemas en otros lugares. Pero para el objetivo contextual agrícola, la infiltración es una fuga de agua del sistema productivo.
Este pilar se divide en 2 ámbitos principales:
- Conducción extra-predial
- Conducción intra-predial
Conducción extra-predial
En este ámbito se considera todo el tramo que se encuentra entre la fuente principal de agua y la ubicación del huerto, por lo que se podría encontrar fuera de la influencia de agricultores (individualmente) mejorar esta condición.
Dentro de este contexto se cuentan aquellos donde la fuente principal de agua es el río, que luego alimenta una red de canales o acequias desde la que los agricultores se abastecen o bien, el sistema de canales comienza en un embalse o acumulador principal donde se almacena el agua durante la temporada húmeda del año, para luego servir de reservorio durante las temporadas más calurosas y con menos agua superficial disponible.
En este ámbito, las pérdidas importantes se asocian principalmente a la infiltración en el perfil de suelo (5 a 40% de fugas), debido a la propia textura de suelo o fallas en la fabricación del sistema que transporta el agua y en segundo lugar, se asocian a la evaporación directa (0,5% a 3% de fuga).
Para mejorar la conducción extra-predial existen diferentes tecnologías y prácticas, que apuntan a minimizar las pérdidas durante el tramo recorrido por el agua.
Canales de tierra
En estos casos, la eficiencia de conducción cambia según la textura de suelo.
Para estos casos, la infiltración es de 15% en suelos livianos, 10% en suelos medios y 5% en suelos pesados [1], aunque la distancia recorrida afecta de forma importante este valor, el promedio de eficiencia para canales de tierra se encuentra entre 40% y 85%, según estudios de casos reales [4] [8].
Canales revestidos
En estos casos, la eficiencia se encuentra entre 80% y 90%, lo que varía según las fallas en construcción o daños del canal y su limpieza.
Canales entubados
En estos casos la eficiencia se encuentra entre 95% y 100%, lo que varía según las fallas en construcción o daños del canal.
Conducción intra-predial
En este ámbito se considera la distribución de agua al interior del huerto o zona productiva y está ligado principalmente al sistema de riego.
En estos casos el foco se pone en la capacidad del sistema para entregar el agua recibida producto de la conducción extra-predial, a las especies vegetales del huerto.
En este ámbito, el sistema de riego se puede dividir en categorías, con sus alternativas indicadas en cada una.
Riego por superficie
La FAO estima un promedio referencial de eficiencia de aplicación de 50%.
Por tendido (o por inundación)
La eficiencia no supera el 30%. [10]
Por surco
La eficiencia varía entre 40% a 70% [10]
Riego por aspersión
La FAO estima un promedio referencial de eficiencia de aplicación de 75%.
Por microjet o microaspersión
La eficiencia varía entre 65% y 85%. [2] [5]
Por pivote fijo o móvil
La eficiencia varía entre 60% y 90%. [9]
Riego localizado
La FAO estima un promedio referencial de eficiencia de aplicación de 90%.
Por goteo
Algunas alternativas son cinta de goteo y gotero estaca.
La eficiencia varía entre 83% a 95%. [6]
Por emisión subterránea
Se puede tratar de cinta de goteo, cinta exudante, gotero o lámina textil.
La eficiencia varía entre 93% y 98%.
RESUMEN DE CIFRAS – PILAR I
Referencias
- Eficiencia de Riego – FAO, 2001
- Contribución al estudio comparativo entre la eficiencia del riego por goteo y la microaspersión en el aguacatero (Persea americana mill) con relación al área mojada en saturación del suelo – R .Martinez, P.Melgarejo, D.Salazar y R.Martínez-Valero, 2003
- Manual práctico para el diseño de sistemas de minirriego – FAO, 2007
- Análisis comparado entre conducción entubada y conducción abierta en canales de riego – PROYECTOS CIVILES E HIDRÁULICOS LTDA, CNR, 2009
- Eficiencia de riego en sistemas localizados – INIA, 2009
- Evaluación de la uniformidad del riego por goteo en condiciones de casas de cultivo en explotación – Reinaldo Cun González, Omar Puig Estrada, Carlos Morales Gómez, Carmen Duarte Díaz, 2011
- Los sistemas de riego por goteo y microaspersión – Mario Liotta (INTA), 2011
- Manejo y distribución de agua en distritos de riego – Edmundo Pedrosa y Gustavo Hinojosa, 2014
- Manual del cálculo de eficiencia para sistemas de riego – DGIAR, 2015
- Manejo y uso eficiente del agua de riego intrapredial para el sur de Chile – Rafael López-Olivarí, 2016
- Diseño de un sistema de riego subterráneo para abatir la evaporación en suelo desnudo comparado con dos métodos convencionales – Gregorio Lucero-Vega, Enrique Troyo-Diéguez, Bernardo Murillo-Amador, Alejandra Nieto-Garibay, F. Higinio Ruíz-Espinoza, F. Alfredo Beltrán-Morañes, Sergio Zamora-Salgado, 2017
- Gestión interna – MundoAgro, 2019
Ingeniero en Biotecnología que lidera el Departamento de I+D+i en Eficagua.
Se especializa en la tríada “suelo-planta-agua”, con un enfoque molecular y visión ecosistémica.